La silla y el péndulo

 

Desde una silla
que armé con cartas de naipe,
observo lo efímero de lo que era eterno,
una pareja feliz ayer, rota hoy,
un día al máximo de salud,
al otro no puedo caminar…

La vida son tres puntos suspensivos,
lo bueno, lo malo, lo lindo y lo feo
se enumera con comas,
el  presuntuoso que vive poniendo puntos y aparte
escribirá un texto mal redactado de recuerdos.

Consciente de lo frágil de mi silla,
tengo alternativas por si se cae una pata.
Pobre del que se cree sentado en el trono
y actúa como bufón que se siente rey.

La vida es un viejo péndulo de un reloj
donde los extremos son lo bueno y lo malo
las alegrías y las tristezas, es inevitable,
está en uno cómo disfrutar el extremo bueno
y sacar oportunidades y resiliencia del malo.

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